A propósito del conflicto entre España y Marruecos

A nosotrxs nos importa bien poco quién dispara primero, si «su» burguesía o la «nuestra». Como en 1914, y como en cualquier conflicto interimperialista, será el proletariado (de aquí y de afuera) el que ponga la carne de cañón y el que sufra las consecuencias de sus guerras, mientras ellos se reparten el pastel. Por un lado están los intereses del Estado español y el Estado marroquí (hoy por hoy enfrentados), y por otro lado están los intereses del proletariado internacional. Esas organizaciones tan «revolucionarias» y «definidas» que abogan porque el Estado actual tome cartas en el asunto (recordemos que no se trata de ningún tipo de Estado socialista o proletario) se están posicionando a favor de la burguesía española, de su Estado y su brazo armado, alimentando aún más el choque de intereses entre la burguesía española y la marroquí. La realpolitik «roja», siempre tan pragmática y funcional (para el sistema capitalista, obviamente), ayuda a mantener lejos el horizonte revolucionario cultivando el nacionalismo entre las masas. Nosotrxs no nos posicionamos por ninguno de los rapaces en pugna. Criticamos duramente el chantaje del Estado marroquí, por usar a personas migrantes como armas de guerra. Pero si queremos dejar de permanecer espectantes ante todo cuanto acontece, primero debemos ajustar cuentas con «nuestra» burguesía, no pedirle que se haga respetar.